Cali, la ciudad que quiso dejar de ser normal
En 1971, Cali inauguraba un nuevo aeropuerto, nuevas vías, una ciudad deportiva y otra universitaria, abrió hoteles como el célebre Intercontinental y en el siguiente lustro se dotó de una central de transporte carretero -el ferrocarril, que permitió que Cali pasara a ser un pueblo pequeño a una capital regional, venía en franco declive-. En ese aspecto bien vale la pena precisar un dato: antes del Ferrocarril del Pacífico, la población de la capital del Valle no llegaba a treinta mil habitantes; a mediados de siglo la población se había multiplicado por 10; para 1980 se había multiplicado por cinco con respecto a la década de 1950 y a finales del siglo XX ya la ciudad se acercaba a los dos millones de habitantes. Sin embargo, el protagonismo que tuvo la ciudad con los Juegos Panamericanos de 1971 se fue diluyendo con el paso de los años: las infraestructuras nuevas fueron pocas desde entonces, la actividad económica empezó a mostrar señales de cambio a las cuales la ciudad no