Provincia
El estreno de Escobar en la televisión local nos dispersó un poco del suceso del día, correspondiente a la elección del nuevo director general de la OIT, al que el hoy vicepresidente aspiraba. Realmente la derrota es lo de menos. Es un esfuerzo interesante que hizo el Gobierno colombiano el de posicionar a una figura nacional en el plano internacional. Y las críticas que hablan de dinero desperdiciado en una campaña fallida podrían hasta despreciarse: el riesgo de perder una elección está latente y es la incertidumbre la que motiva la participación de candidatos. Nadie aspiraría a un cargo si supiera ex ante que va a ser derrotado y si lo supiera, sencillamente no habría competencia. El asunto no es ese, en realidad. Quienes se concentran en cuestionar la derrota sufrida por el candidato colombiano hoy tienen ese mismo defecto, tan característico de nuestra nacionalidad: la limitada concepción de la realidad. Insisto, perder no es un problema. Si se le quiere ver desde ese enfoqu