Ensayo de trenes
El interés por la historia de los ferrocarriles en Colombia me surgió por casualidades de la vida. Recuerdo que con mi padre solíamos ir con nuestro perro, un labrador dorado, en una caminata que nos llevaba hasta la desembocadura del río Pance con el río Jamundí. Una zona llena de plantaciones de caña y pastos para ganado. Recorriendo ese sitio, dimos con lo que eran los vestigios de la antigua línea del ferrocarril que venía de Cali, que nos condujeron a un viejo puente de acero sobre el río Jamundí, ya carcomido por los años, que fácilmente podría tener entre 90 y 100 años: ¿cómo se transportaba entonces la gente entre Cali y el sur del país?, era evidente que en aquel entonces la gente usaba medios diferentes a las carreteras, que si hoy son incipientes, antes eran trochas. Y no me equivocaba, entre 1925 y 1970, el Ferrocarril del Pacífico extendió la línea sur entre Cali y Popayán, cubriendo municipios como Jamundí, Morales y Piendamó, en un tendido de aproximadamente 150 kilóme