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Mostrando entradas de noviembre, 2013

Camino a la paz

Si hacer la paz se ha vuelto en un asunto que ha polarizado a la opinión pública como pocas veces antes, es señal inequívoca que el conflicto debe terminar y ser arrancado de la agenda nacional. El proceso de negociación con las FARC en La Habana es un punto al que inevitablemente deberíamos llegar. No ha habido conflicto que no termine en un acuerdo, así este haya sido precipitado por una superioridad militar de una de las partes, y los que han terminado en un aplastamiento de una de las partes han finalmente impuesto costos  altos y acumular unas perdidas irrecuperables. Veamoslo de esta forma: Hitler finalmente fue destruido por los aliados -probablemente en aquel momento la acción de la guerra era la más viable-, pero el no haber detenido la locura nazi por otras vías  representó un elevado costo de 45 millones de vidas. El conflicto armado en Colombia supone un panorama mucho más complejo: nadie duda de la ventaja militar del Estado ni de la incapacidad de las FARC para imponer

Maniqueo y las reformas

Las reformas son esas ideas y nociones que los gobiernos suelen tener en mente para dejar una impronta en la historia. No obstante, el carácter reformista de los gobiernos en Colombia normalmente ha tenido menos éxito que las reformas impulsadas en otras latitudes, donde suele ocurrir que estas han tenido efectos mucho mayores que en nuestro país. Sin embargo uno de los grandes temores de la sociedad colombiana es que en el espíritu de las reformas vaya un tufo gatopardista: que todo cambie para que todo siga igual; es claro que Colombia requiere unas reformas profundas en muchos aspectos de su contexto político, social y económico que, a todas luces, son disfuncionales o han demostrado ser obsoletas. Un sistema político que a menudo se impone como la mayor barrera para el desarrollo, una salud que viene demostrando incapacidad para proveer a los usuarios un servicio de calidad o una justicia lenta y saturada, requieren una profunda cirugía. Sin embargo no son pocos los esfuerzos para